En el marco del Plan Nacional de Desarrollo, el Gobierno fijó metas ambiciosas para transformar el sector de transporte y logística en Colombia, apuntando a mejoras significativas en infraestructura, componentes ambientales y eficiencia de costos. Sin embargo, a pesar de estar a mitad del cuatrienio, los expertos señalan que los avances han sido escasos y los retos son inmensos.
Metas ambiciosas, avances limitados
El Plan Nacional de Desarrollo estableció que el porcentaje del costo logístico sobre las ventas debería reducirse en 10,1 puntos porcentuales en cuatro años, pasando de 12,6 % en 2020 a 11,5 % para 2026. No obstante, según Sinergia 2.0, el portal de medición del Departamento Nacional de Planeación (DNP), aún no se ha registrado una disminución significativa. A pesar de haberse iniciado el trámite de contratación para actualizar y analizar la Encuesta Nacional Logística (ENL), los avances son prácticamente nulos.
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Asimismo, el Ministerio de Transporte se propuso priorizar y poner en marcha rutas de servicios aéreos esenciales. Con la incorporación de más rutas por parte de Satena, especialmente en las zonas más remotas de Colombia, el avance de este indicador es del 39,5% con 50 rutas añadidas, todavía lejos de la meta esperada.
Seguridad Vial: Un desafío persistente
Uno de los objetivos más críticos del Mintransporte es la reducción de muertes viales en un 23%, de 7.238 en 2021 a 5.723 en 2026. Sin embargo, la herramienta del DNP muestra un avance del 7,25%, muy por debajo de lo esperado, con más de 8.000 fallecimientos en 2023. A pesar de los esfuerzos de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, que ha implementado políticas de seguridad vial y atención a víctimas en varios departamentos, los resultados no han sido los deseados.
Compromiso ambiental: Un lento progreso
En el ámbito ambiental, el Gobierno se propuso mitigar 2,14 millones de toneladas de CO2 para 2026, frente a las cifras de 2021. Según Sinergia, se han logrado algunos avances con la entrega de informes sobre el panorama internacional y la modernización del transporte, incluyendo la desintegración de 332 vehículos y la incorporación de 781 vehículos eléctricos. Sin embargo, la falta de seguimiento y entrega de información en el modo fluvial ha retrasado el progreso.
Críticas y perspectivas de los gremios
Los gremios del sector han expresado su preocupación por los limitados avances. Miguel Ángel Espinosa Alfonso, presidente ejecutivo de Fitac, señaló que los primeros dos años del gobierno de Gustavo Petro han mostrado escasos avances en la implementación del Plan Nacional de Desarrollo. Espinosa subraya la necesidad de mejorar la eficiencia en el uso de recursos y la implementación de sistemas de seguimiento más robustos.
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Por su parte, el sector del transporte de carga resalta ciertos logros, como la revisión del precio del diésel, pero también exige mayor atención a la seguridad, la reducción de la informalidad y la modernización de la flota. Nidia Hernández, presidenta de Colfecar, enfatiza la necesidad de garantizar que todas las empresas de transporte reporten información al Registro Nacional de Despachos de Carga (RNDC) y cumplir con el SICE-TAC.
Regulación de aplicaciones de movilidad: Un reto pendiente
En el ámbito de las aplicaciones de movilidad, José Daniel López, director de Alianza In, señala que el gran reto es la regulación. A pesar de ser legales, estos servicios requieren una normativa específica que aún no ha sido impulsada por el Gobierno. La falta de avance en este campo afecta a más de 100.000 familias que dependen de estas plataformas para generar ingresos.
A pesar de los desafíos y los avances limitados, el sector transporte y logística en Colombia sigue siendo un pilar crucial para el desarrollo del país. La administración actual enfrenta la urgente necesidad de acelerar el cumplimiento de sus metas, mejorar la eficiencia en la ejecución de políticas y asegurar un marco regulatorio adecuado para enfrentar los desafíos del futuro.
Fuente: Portafolio