Transporte

El transporte de carga por el río Magdalena sigue, pero fraccionado

La navegabilidad por el río Magdalena entre Barrancabermeja y Barranquilla no ha parado. Pero el transporte de carga se ha tenido que fraccionar en el tramo entre Puerto Wilches (Santander) y San Pablo (Bolívar), debido a los bajos niveles históricos de los caudales, efecto de la sequía causada por el fenómeno del Niño. De acuerdo […]

La navegabilidad por el río Magdalena entre Barrancabermeja y Barranquilla no ha parado. Pero el transporte de carga se ha tenido que fraccionar en el tramo entre Puerto Wilches (Santander) y San Pablo (Bolívar), debido a los bajos niveles históricos de los caudales, efecto de la sequía causada por el fenómeno del Niño.

De acuerdo con el director ejecutivo de la Corporación Autónoma Regional del Río Grande de la Magdalena (Cormagdalena), capitán (r) Luis Álvaro Mendoza Mazzeo, el nivel más bajo en toda la historia de las mediciones del río se presentó el viernes pasado, cuando reportó apenas 17 centímetros de altura.

 

Para una navegación aceptable por estas aguas se requiere un mínimo de 1,64 metros.

“Entre el sector de Yarirí (municipio de Puerto Wilches) y San Pablo se está navegando fraccionado. No hay paso para embarcaciones mayores y solo están subiendo barcazas o botes vacíos llevados por remolcadores”, manifestó Mendoza.

Para que el transporte de carga no se pare totalmente en este importante afluente, se viene utilizando una flota de 14 convoyes, cada uno de los cuales tiene un remolcador que empuja de 6 a 8 barcazas para navegar entre Barrancabermeja y Cartagena. En el trayecto entre Puerto Wilches y San Pablo, como no hay paso por el bajo nivel crítico del agua, el convoy se tiene que ‘partir’ o desarmar y pasar con menos barcazas o botes para seguir navegando.

Para superar estas dificultades, el director de Cordomagdalena informó que en el área hay dos equipos draga y otra maquinaria para remover los bancos de sedimentos en el río y darles profundidad a las aguas, a de que se pueda abrir el paso y navegar por el trayecto crítico.

También estos equipos se han desplazado al sitio Calamar (Bolívar), donde se han presentado igualmente dificultades en el cruce entre las aguas del río y el mar.

“El dragado que se ha hecho es de mantenimiento para que el río alcance la profundidad necesaria y así no haya problemas en la navegación en esta zona, por donde las barcazas van cargadas de combustibles desde Barrancabermeja”, expresó.

Otro punto que estaba dificultando el paso para los convoyes era por el tramo del canal del Dique, en el sitio de Santa Lucía, donde Cormagdalena desplazó una draga para dejar esta parte del río nuevamente navegable.

Este trayecto del río Magdalena por el canal del Dique, entre Calamar y Cartagena, con la draga trabajando las 24 horas, ha permitido que el transporte se haga sin fraccionamiento de la carga.

Las dificultades presentadas en la navegabilidad por el afluente han afectado el transporte de combustible. Por este medio, la movilización de carga en enero es de entre 850.000 y un millón de barriles.

Pero entre el primero y el 20 de enero pasados únicamente se pudieron mover 146.700 barriles entre Barrancabermeja y Cartagena, y 4.500 de acero, indicó Cormagdalena.

En cuanto al transporte de pasajeros con lanchas por esta vía hídrica, Mendoza aseguró que están navegando también con alguna dificultad, pero que la movilización sigue.

Llamó la atención sobre el hecho de que las personas están confiándose en caminar por las orillas del Magdalena, en donde el bajo nivel de las aguas es crítico, como en el sector de Barrancabermeja. “Hay que tener cuidado porque alejándose de la orilla hay mayores profundidades y puede ser riesgoso”. Por esta causa, dijo que ya se había presentado un accidente.

Fuente: ET

Fotografía: Flickr Juan Carlos O’Hara Gudman / Jara Guzmán

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