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MOVILIDAD: ¿Por qué colapsa Bogotá con solo un accidente en una troncal?

Mal comportamiento de los conductores de TM y atraso en vías, entre las causas de los atascos. Por qué un solo choque en una troncal de TransMilenio colapsa a toda la ciudad? Esa era la pregunta que se hacían este martes en la mañana decenas de ciudadanos a quienes les fue imposible llegar a sus […]

Mal comportamiento de los conductores de TM y atraso en vías, entre las causas de los atascos.

Por qué un solo choque en una troncal de TransMilenio colapsa a toda la ciudad? Esa era la pregunta que se hacían este martes en la mañana decenas de ciudadanos a quienes les fue imposible llegar a sus trabajos por causa de un articulado varado en un sitio neurálgico de la ciudad.

Según Leonardo Cañón, director técnico de Operaciones Troncales de TransMilenio, la gravedad del incidente fue el sitio en el que se presentó: el intercambiador deprimido que conecta las troncales de Suba, calle 80 y NQS.

Lamentablemente, en este punto es por donde más pasan pasajeros en hora pico. Hemos llegado a contabilizar cerca de 60.000 viajeros”.

Lo cierto es que a las 6:37 de la mañana, un bus de la empresa Transmasivo, que reportó un daño en el sistema neumático, colapsó a la ciudad. ¿Fue ágil la respuesta ante la crisis? Según la empresa TransMilenio, sí, teniendo en cuenta la gravedad de la emergencia. Según explicaron, al punto se desplazó de inmediato un equipo para solucionar la contingencia. “Sin embargo, por el alto flujo de tráfico y de personas la remoción del vehículo varado fue más complicada. Lo que vimos hoy fue consecuencia de tener la movilidad restringida en este punto tan neurálgico”, dijo Cañón. Según la empresa, 28 minutos después, ya había un equipo de grúas, mecánicos y gestores de tráfico atendiendo la emergencia.

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Pero mientras para ellos los tiempos habían sido óptimos para el resto de la ciudad el accidente configuró una pesadilla a pesar de que a las 7:34 ya se habían activados todos los protocolos de desvíos, contraflujos y paso asistido. Las troncales de la calle 80, Suba y NQS, así como las estaciones de la Castellana y el Polo, estaban presentando colapsos. Mucha gente tuvo que bajarse de los articulados para buscar la manera de llegar a sus sitios de trabajo y no hay plan de contingencia para que los pasajeros puedan encontrar otras opciones de hacer trasbordo en otros buses.

¿Por qué pasa esto?

Las teorías van desde lo obvio hasta en fallas en temas como cultura ciudadana.

En las primeras están los 20 años de atraso vial que confinan a los ciudadanos a recorridos de hasta 77 minutos por las congestiones y la falta de corredores de alta circulación en el occidente, que tienen recargado el tráfico por el oriente de la ciudad. “Es un problema de oferta de infraestructura vial y la demanda de carros que se mueve en tiempo real. El problema llega cuando la demanda sobrepasa a la oferta. Eso es obvio, pero hay veces construir más troncales no es la única solución porque los factores de trancón son múltiples y difíciles de proveer”, dijo Luis Eduardo Olmos, del grupo de Simulación de Sistemas Físicos del Departamento de Física de la Universidad Nacional.

El experto dice que habría que implementar otras estrategias para que no todos los ciudadanos se vean obligados a movilizarse al mismo tiempo en sistemas como TransMilenio, que se mejoren los tiempos de asistencias de estas eventualidades y que la ciudad piense en la forma en que sus ciudadanos no tengan que moverse de extremo a extremo para ir a trabajar. “Aunque suene aventurado, los carros autónomos serían una solución en el futuro; incluso, en el transporte masivo. Ya no existiría el factor humano en los accidentes y las probabilidades de que ocurran van a ser menores. Estos tendrían la información de flujos en toda la ciudad. Podrían cambiar de ruta mejor que un humano porque pensarían en el beneficio de toda la red”.

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Buses viejos

En un plano más actual, otros le atañen a la antigüedad de los buses, no solamente del sistema TransMilenio sino del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP), los colapsos, sobre todo porque la ciudadanía percibe que todo el tiempo se están varando o están involucrados en incidentes. En el caso del accidente de este martes, el bus no es de la fase I, cuyos vehículos pueden tener una antigüedad de hasta 16 años, pues había sido matriculado en el 2008; sin embargo, hay que tener en cuenta que toda la flota de estos buses puede recorrer hasta 490.000 kilómetros diarios. Por eso, una falla mecánica es prácticamente inevitable. La misma empresa TransMilenio reconoce que los buses de la fase I siguen circulando según las recomendaciones del fabricante. La pregunta es: ¿cada cuánto se les están haciendo revisiones técnico- mecánicas?

Según TransMilenio, la ley dice que sea anual, pero ellos hacen inspecciones aleatorias diarias e inmovilizaciones a vehículos por problemas. “Recibimos certificaciones semestrales bus a bus emitidas por los fabricantes avalando los procesos de mantenimiento preventivo y rutinario conforme a los manuales, normas y garantías”.

Lo mismo pasa con los del SITP. Solo entre enero y abril de este año reportaron 607 sucesos, casi cinco incidentes diarios, que, por lo general, termina por colapsar una vía. Aunque las cifras no revelan las causas de estos accidentes se presume que el 80 por ciento es por fallas humanas, y ahí entra el otro tema de análisis: los bogotanos no sabemos manejar.

Según Olmos, uno de los mayores factores que puede colapsar a una ciudad es la forma de manejar de los bogotanos, incluso de los que están a cargo del transporte público, y en el caso que nos atañe, de los buses de TransMilenio.

“Hace diez años hicimos un modelo del manejo del bogotano promedio y simulamos el flujo de un calle de Bogotá.
Lo que resultó de este estudio es que se mantiene una distancia muy corta del vehículo de enfrente. Si usted revisa los manuales, no se está cumpliendo la distancia de seguridad. No asumimos que el otro carro puede frenar de forma intempestiva. Ahí se presentan los choques simples que tanto colapsan la ciudad”.

Finalmente, los expertos recomiendan un mejor levantamiento de datos. “De esto depende que las estrategias para mejorar el tráfico se basen en una situación lo más cercana a la realidad”

Fuente: EL TIEMPO

Imagen: EL TIEMPO

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