Reabren parcialmente la vía Bogotá-Villavicencio

La rehabilitación de este tramo de la vía no ha sido una tarea sencilla. Entre las obras realizadas, se destaca la demolición de bloques de roca que amenazaban con deslizarse hacia la carretera y la construcción de una barrera de protección tipo tablestacado. Esta estructura está diseñada para detener la caída de material rocoso, proporcionando mayor seguridad a quienes transitan por la zona.

Además, se reforzó el terreno mediante la perforación e inyección de 41 tubos petroleros, un método que incrementa la estabilidad y reduce el riesgo de nuevos deslizamientos. Complementariamente, se implementaron láminas marchantes y llantas como medidas adicionales para proteger la barrera.

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Otra intervención crucial fue la construcción de un muro de contención de 22 metros de largo en el kilómetro 69+350. Para erigir esta estructura, se realizaron excavaciones, demoliciones y la instalación de 30 micropilotes, elementos fundamentales para garantizar la estabilidad a largo plazo del tramo afectado.

Aunque la reapertura es una noticia alentadora, no se trata de un retorno total a la normalidad. El tráfico vehicular estará restringido a un solo carril, lo que exige extrema precaución por parte de los conductores y el cumplimiento riguroso de las señales de tránsito dispuestas en la zona.

Esta restricción estará vigente mientras las autoridades evalúan nuevas intervenciones para garantizar la seguridad total en el área. Asimismo, el Gobierno ha advertido que el tránsito será monitoreado y podrá suspenderse temporalmente si las condiciones climáticas, como lluvias intensas o sismos, generan nuevas amenazas en el terreno.

A pesar del avance logrado, las obras ejecutadas son de carácter temporal. Según la ANI y Coviandina, se continuará evaluando la estabilidad del terreno y la necesidad de implementar medidas adicionales. Esto refleja un compromiso por parte de las autoridades para garantizar la seguridad vial en una carretera vital para la conectividad del centro del país con los Llanos Orientales.

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Es importante destacar que la reapertura parcial de este tramo no solo beneficia a los transportistas y viajeros habituales, sino que también tiene un impacto directo en la economía regional. La carretera Bogotá-Villavicencio es un eje clave para el transporte de carga, conectando la capital con el oriente del país, y su cierre prolongado había generado importantes pérdidas para los sectores productivos.

La reapertura del tramo en la vía Bogotá-Villavicencio representa un avance significativo, pero también recuerda la vulnerabilidad de la infraestructura vial ante fenómenos climáticos extremos y la necesidad de soluciones estructurales a largo plazo.

Los conductores y usuarios deben estar atentos a las condiciones climáticas y seguir las indicaciones de las autoridades. Aunque queda mucho por hacer, este esfuerzo conjunto entre la ANI y Coviandina marca un paso importante hacia la recuperación de una de las rutas más estratégicas del país.

Fuente: Portafolio