Fragilidad de laderas, trampa para movilidad hacia Medellín
Por su condición geográfica dentro de un valle rodeado de montañas Medellín parece encerrada y con pocas salidas hacia otras regiones del departamento y del país, lo que la pone en riesgo de quedar aislada.
A este factor se suma la condición montañosa de Antioquia, que obligó a que sus más importantes carreteras se construyeran abriendo laderas, en tiempos en los que la tecnología para hacer vías no tenía los avances de hoy, cuando la tendencia es hacer más túneles y viaductos que eviten desestabilizar las montañas.
El colapso de la autopista Medellín-Bogotá desde el pasado 28 de diciembre, antecedido del de octubre por la tragedia en la cantera Las Nieves, que dejó 16 muertos, ambos eventos desatados por deslizamientos de tierra, deja en evidencia la fragilidad de las vías principales que llegan a la ciudad y al Valle de Aburrá.
Y eso que la conexión con el Valle de San Nicolás es con la que más alternativas cuenta la ciudad, pues además de la autopista (habilitada para circulación 24 horas nuevamente desde ayer), tiene la doble calzada a Las Palmas y las vías al Escobero y Santa Elena, que le dejan el camino expedito para conectar con Oriente. Pero en realidad no es así.
Iván Sarmiento, ingeniero civil y experto en Movilidad, señala que ni Las Palmas ni las otras dos vías tienen capacidad de reemplazar la autopista cuando colapsa. “Las Palmas ha presentado colapsos e igual que la Medellín-Bogotá, está sometida a inestabilidad”. Santa Elena y El Escobero no tienen capacidad para transporte de carga y por eso las afectaciones con los cierres.
Las pérdidas que deja la autopista el último mes superan los 30 mil millones pesos”, coinciden en afirmar Luis Ramírez, director ejecutivo de la ATC y Oswaldo Ordóñez, profesor de la Universidad Nacional Seccional Medellín.
José Fernando Villegas, director de la Cámara Colombiana de la Infraestructura Antioquia, y Martín Pérez, presidente de la Sociedad Antioqueña de Ingenieros y Arquitectos (SAI), advierten de los riesgos de Medellín con la actual estructura vial.
Fuente: El Colombiano
Imagen: Archivo El Colombiano