Ambas empresas ya trabajan en el desarrollo de estos vehículos. Ford entregará el suyo en 2020.
Elmar Frickenstein, vicepresidente sénior de conducción automatizada de BMW, hizo su entrada en el centro de convenciones de Moscone en California a bordo de un vehículo i3, el cual no maniobraba. Tras saludar al presidente de Intel, Brian Kzranich, le dijo “ya se va a parquear solo”.
La escena que se presentó en el primer día del Foro de Desarrolladores de Intel (IDF), en San Francisco, coincidió con la noticia de que Ford lanzará sus vehículos autónomos en el 2020. A esta misma ‘onda’ de los carros con un desarrollo tecnológico mucho más avanzado entraron la firma alemana BMW y la desarrolladora de chips de Estados Unidos Intel.
Bridget Karlin, directora de la división del internet de las cosas, indicó cuatro pilares en los que Intel trabaja para que estos vehículos estén en las calles en el 2020.
“El principal requerimiento para que los carros autónomos se popularicen es que el número de accidentes sea cero. Es algo fundamental. En segundo lugar, deben ser incluyentes, es decir, que garanticen movilidad para todos, incluyendo a los discapacitados”, precisó en una charla con la prensa de Latinoamérica.
Karlin también agregó que este tipo de carros podrán ayudar a reducir el volumen de tráfico. “Los vehículos autónomos serán capaces de procesar información para evitar los trancones”, añadió.
El último principio tiene que ver con la experiencia de usuario. “Buscamos una mejor experiencia a la hora de manejar”, expresó.
La agricultura, minería y carga, los primeros en usarla
Las industrias de la agricultura, la minería y la del transporte de carga serán las primeras que podrán empezar a automatizar sus vehículos, eso sí, de una forma semiautónoma.
Para Karlin, una segunda fase involucrará a buses y taxis. Intel estima que un tercio del transporte público será autónomo para el 2030.
Procesamiento de la información
Para que este tipo de carros puedan rodar se necesita un gran centro de computo y de datos.
En el tema automotriz, los expertos estiman que un vehículo autónomo demandará una carga de 40 GB por minuto. Esa información será generada por los sensores del vehículo y por su comunicación permanente con otras máquinas. Para ello será imperativa la implementación de redes 5G. Los automóviles, además, dispondrán de equipos de computo en su interior.
¿Si su carro autónomo, por alguna razón, deja de funcionar, lo podrá manejar como en los viejos tiempos, en modo manual?
“La respuesta rápida es sí. Hemos dado la posibilidad para que el conductor pueda asumir las riendas del vehículo cuando lo desee. A ese concepto se le llama semiautónomo”, concluyó Karlin.
Se estima que, para después del 2020,x en el mundo circulen unos 100 millones de carros semiautónomos.
Fuente: El tiempo
Fotografía: El tiempo