Propuesta de la Alcaldía busca que esta sea la primera vía en donde se reduzca la velocidad.
Cincuenta kilómetros por hora. Ese sería el límite de velocidad que se busca imponer en la avenida Boyacá, una de las más amplias y rápidas de la ciudad, para reducir la accidentalidad y las muertes en las vías.
Según cifras de la Policía de Tránsito, solo en 2015 se presentaron 2.055 accidentes viales en la avenida Boyacá, entre la carrera 1.ª y la calle 185. De estos, 54 resultaron fatales, sobre todo para peatones y motociclistas, y 793 dejaron personas lesionadas.
La Secretaría de Movilidad dio a conocer el programa ‘Visión Cero’, cuya estrategia ha sido implementada en Europa y en algunas ciudades de América Latina y ha obtenido resultados importantes en disminución de fatalidades y lesiones por choques de tránsito.
Juan Pablo Bocarejo, secretario de Movilidad, manifestó que a este programa se debe sumar un compromiso político y ciudadano fuerte para hacerlo viable en la ciudad. (Lea también: Bajar las muertes de peatones, meta de la Secretaría de Movilidad)
“’Visión Cero’ tiene unas estrategias claves, como rediseñar la ciudad a fin de que su estructura sea más para las personas y no para andar a velocidades altas en los carros. Si permitimos vehículos circulando a 60 u 80 kilómetros por hora y estos atropellan a un peatón, este impacto es similar a una caída desde el cuarto piso de un edificio”, asegura Bocarejo.
No se trata solo de poner señales de tránsito con un número cincuenta y más policías. Habrá intervenciones en la vía, como la instalación de reductores de velocidad que obligarán a los conductores a levantar el pie del acelerador.
La intervención se haría en el sector sur de la avenida, ya que allí es donde los peatones corren más riesgo, especialmente entre la autopista Sur y la avenida de Las Américas, entre las calles 99 sur y 71 sur, y entre las calles 66 y 75.
La propuesta viene del convenio de cooperación entre el Distrito y la iniciativa global para la seguridad vial de la fundación Bloomberg Philanthropies.
A esto se sumará una mayor señalización, la instalación de reductores de velocidad en algunas intersecciones y más policías.
Bocarejo aseguró que se empezará a trabajar con expertos de Dinamarca y Suecia para ver cómo iniciar acciones concretas en torno a las velocidades.
“Podemos generar en el centro y sectores comerciales las llamadas zonas 30 (límite de velocidad), ejes en donde se alcanzan velocidades altas que generan accidentes. Por ejemplo, la Boyacá es una de las vías que más deja fatalidades en el país, y hay que mejorar las condiciones para peatones y motociclistas”, agregó.
Fuente: El tiempo
Fotografía: El tiempo