Infraestructura avanza: Colombia en obra
El ambicioso programa de infraestructura de transporte que el Gobierno Nacional puso en marcha desde hace cuatro años lestrajo diferentes retos en materia de ingeniería a los constructores.
No es para menos, pues el objetivo es modernizar las vías del país que tienen un atraso de casi 20 años, según los estudios realizados por diferentes entidades.
Para el ingeniero Mario Huertas, quien es socio mayoritario de tres concesionarios ejecutores de estas iniciativas, uno de los principales retos está en los plazos de ejecución.
“Los proyectos 4G tienen longitudes aproximadas de 200 kilómetros, entre construcción de vías nuevas, mejoramiento y rehabilitación de la calzada existente, construcción de viaductos sobre cuerpos de agua y túneles. Es por esto que cada proyecto se divide en unidades funcionales, cuyos plazos van desde uno hasta cinco años”, comentó Huertas.
El ingeniero explicó que esto supone que “en todas las unidades funcionales hay frentes de obra abiertos al mismo tiempo, lo cual además de una exigencia de recursos de maquinaria, de personal y financieros importantes, implica una adecuada planeación de la obra y de la ruta crítica de cada proyecto”.
Además, para cumplir con los plazos de ejecución se deben desarrollar obras especialmente representativas y complejas en cada uno de los proyectos, que requieren, entre otras cosas, gestión de diseños, métodos constructivos y mitigación de impactos socio-ambientales.
Ejemplos de esto son las obras de la Concesión Costera Cartagena Barranquilla y de la Concesión Alto Magdalena. La primera comprende la construcción del viaducto de 4,7 kilómetros sobre la Ciénaga de la Virgen, y la segunda dos puentes sobre el río Magdalena, en cuales se “han desarrollado estrategias de diseño y construcción innovadoras para optimizar su ejecución”, precisó Huertas.
Otro de las cualidades que tienen las vías 4G es que “establecen una política de aseguramiento de la calidad en función de factores de desempeño”, aseguró el profesor de la Escuela Colombiana de Ingeniería Julio Garavito, José Ignacio Nieto García.
Una de las obra de mayor nivel es el viaducto sobre la Ciénaga de la Virgen, en las que se han aplicado técnicas especiales, algunas de ellas provenientes del extranjero.
“El sistema constructivo del Viaducto sobre la Ciénaga de la Virgen, el cual se construye con un método especial que permite mitigar todos los impactos, a través de elementos prefabricados en un complejo de producción y luego instalados de arriba hacia abajo por un equipo especial”, detalló Mario Huertas, accionista mayoritario de la concesión de esta obra y presidente de la firma MHC.
Por su parte, Nieto se refirió a “las especificaciones en términos de pendiente máxima longitudinal de las carretas, que han exigido una nueva técnica de diseño geométrico donde la comodidad y la seguridad del usuario adquiere un papel importante”.
Para la presidente de la Sociedad Colombiana de Ingenieros, Diana Espinosa, el programa de vías 4G fue un reto porque “impulsó a la ingeniería colombiana en la búsqueda de soluciones tecnológicas de las más altas calidades, de rendimientos constructivos y de avanzada”.
Otro avance que tuvo el Gobierno Nacional en la estructuración de este ambicioso programa de modernización de la infraestructura de transporte en el país fue la adopción de normas europeas y americanas, adicionales a las establecidas por el Instituto Nacional de Vías (Invías) para la construcción de las nuevas autopistas.
“Por ejemplo, para el caso de las obras como el viaducto Gran Manglar, se está utilizando una técnica especial tipo top down, es decir, construido de arriba hacia abajo, que ha sido utilizado con éxito en proyectos en Estados Unidos y Europa”, dijo Huertas, al agregar que “al final del día las innovaciones internacionales y la capacidad de avance de los nacionales contribuirá a la entrega de obras de últimas especificaciones para los usuarios”.
El ingeniero civil de la Escuela Colombiana de Ingeniería destacó que en algunos proyectos se han empleado técnicas utilizadas en Suiza, Austria e Italia, como los métodos de construcción de túneles y viaductos, para suavizar las pendientes y, en consecuencia, aumentar las velocidades y la capacidad vial de dichas autopistas.
Colombia estará en obra en los próximos 5 años, en los que se tendrán frentes de trabajos abiertos en cada región, lo que implicará algunas molestias para el usuario de las vías ya existentes y que tendrán que mitigar los concesionarios con un adecuado manejo del tráfico, pero lo importante de esto es que “desde ya representa un beneficio en materia de inversión, empleo y al final un desarrollo para el país”, puntualizó el ingeniero Huertas, quien ha participado en todas las generaciones de vías que ha tenido el país.
Fuente: Portafolio
Imagen: Archivo Portafolio