Comunicado Importante Noticias Transporte

Lo que esperan desde la CCI del próximo Ministro de Transporte

A puertas de culminar el mandato del presidente Iván Duque, los distintos sectores están empezando a mostrar sus ideas y dando a conocer los retos de los distintos sectores.

Juan Martín Caicedo, presidente de la Cámara Colombiana de Infraestructura (CCI), en entrevista con Portafolio contó su perspectiva sobre el gobierno de Gustavo Petro, el perfil que espera del nuevo ministro de Transporte, sus perspectivas sobre las entidades a cargo del Ministerio y las prioridades del sector. ¿Qué opina la Cámara de la Infraestructura sobre las caras ya conocidas en el nuevo gabinete ministerial? Somos respetuosos del fuero legal e institucional del señor presidente electo. Hemos conversado, particularmente, con el nuevo ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo quien, por lo demás, nos ha puesto de presente su convicción de preservar y seguir apostándole el modelo de Asociaciones Público Privadas, APP, en el desarrollo de la infraestructura nacional, dadas las evidentes limitaciones del fisco, y la prioridad que dará el nuevo gobierno al gasto social. Baste recordar que hoy contamos con más de 6.000 kms de vías concesionadas, complementadas con más de 600 puentes y viaductos y una veintena de túneles en los sitios más complejos de la geografía nacional. 

¿A juicio de la CCI, la obra pública no concesionada, también debe ser una necesidad? Por supuesto que sí, en términos de adjudicaciones transparentes, que garanticen el cumplimiento legal de los pliegos-tipo en los procesos licitatorios, y sin que la Procuraduría General se siga haciendo la de la ‘oreja mocha’ sobre el particular. La obra pública, en efecto, se complementa y articula con la red concesionada. Pero mal podemos olvidar que esta última, vale decir, la obra concesionada, responde no solo por la construcción de las vías, sino también por su operación y mantenimiento. Valga la oportunidad para insistir, igualmente, en el imperativo de las vías secundarias y terciarias. No tiene sentido, en efecto, que el país siga avanzando en la construcción de sus vías principales, sin que los centros de producción agropecuaria se conecten con ellas. Detrás de la falta ostensible de vías terciarias hay una inmensa paradoja, en cuanto que el Sistema General de Regalías exhibe, sin pudor alguno, saldos billonarios por ejecutar, cercanos hoy a los 7 billones de pesos.

¿En conclusión, qué espera el gremio de la infraestructura del nuevo ministro de Transporte, aún no designado? Se espera de él un perfil técnico, que genere tranquilidad a los inversionistas y financiadores que han venido apoyando al modelo concesional, y también a los bancos multilaterales que han confiado en él a pie juntillas. Desde esa perspectiva, el nuevo ministro deberá preservar la institucionalidad y el altísimo nivel técnico de organismos como la Agencia Nacional de la Infraestructura, ANI, que hoy lidera el manejo de las concesiones, en medio de múltiples reconocimientos y elogios en los escenarios mundiales más exigentes. Pero no solo la ANI… Por supuesto. Igualmente, importante el perfil técnico de la Unidad de Planeación de Infraestructura, UPIT, creada justamente para supervisar la visión de largo plazo de la infraestructura de transporte, prevista hoy en el Plan Maestro de Transporte Intermodal (2015-2035), que es la carta de navegación del sector para los próximos años y que fue elaborado nada más ni nada menos que por Fedesarrollo, el centro de pensamiento más destacado de América Latina. Esa visión de largo plazo otorga a la infraestructura la condición de política de Estado, que trasciende los ciclos políticos de los gobiernos de turno. ¿Y por el lado del Invías? Tampoco debe soslayarse la idoneidad profesional y técnica en la dirección del Instituto Nacional de Vías, Invías, entidad sobre la cual recae la responsabilidad de manejar la obra pública. Pero volvamos al perfil que esperan del nuevo ministro del ramo. El perfil técnico que esperamos arrope al nuevo titular de la cartera de Transporte no descarta la sensibilidad política, en el buen sentido de la palabra, que debe adornar al nuevo rector de ese despacho, de cara al imperativo de brindar oportunidades transparentes, a manos llenas, a centenares de firmas de ingeniería medianas y pequeñas, pymes, que bien pueden contribuir al desarrollo de obras indispensables a lo largo y ancho del país. Ahora bien, en línea con los anuncios hechos por el propio presidente electo, las condiciones morales y éticas del nuevo ministro son insoslayables, sin sombras, para evitar un desgaste innecesario al nuevo gobierno.

Fuente: MSN

Imagen:  MSN

Ver artículo original

Volver a página de inicio