En un anuncio trascendental, la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) y COVIANDINA S.A.S han confirmado que, tras una exhaustiva reunión del Puesto de Mando Unificado (PMU) convocado por la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo y el Ministerio de Transporte, se ha dado luz verde al inicio de la Fase 4A del Plan de Contingencia Operativa en la Vía Bogotá-Villavicencio. Esta decisión permitirá el tránsito vehicular continuo para el transporte de servicio público y especial de pasajeros.
Sin embargo, es fundamental destacar que esta aprobación está sujeta al cumplimiento de estrictos requisitos por parte de las empresas de transporte, que serán verificados por la autoridad de tránsito. Además, las condiciones climáticas y de seguridad también serán factores determinantes, ya que el riesgo persiste en esta importante vía de comunicación.
Una de las medidas más destacadas es la prohibición de acceso a vehículos no autorizados, lo que incluye:
- Aquellos de carga con Peso Bruto Vehicular de 52 toneladas.
- Los de cargas extradimensionadas con un ancho mayor a 3 metros.
- Camacunas con una altura inferior a 60 cm.
Es esencial que los conductores y empresas se mantengan al tanto de estas restricciones para evitar sanciones y garantizar la seguridad en la vía.
En cuanto a la operación actual de la vía, se han establecido las siguientes disposiciones:
- Cierre Total del K44+700 al K50+100.
- Paso bidireccional entre el K44+700 y el K50+100 a través del túnel Renacer.
- Paso a un solo carril por los puentes metálicos 1 y 2, con restricciones para ciertas configuraciones de vehículos y anchos no superiores a 3.00 m.
- Prohibición de cama cunas con altura menor a 60 cm en los puentes metálicos.
- Cierres intermitentes en condiciones de lluvia intensa o leve de larga duración en el tramo del K54+000 al K58+900.
- Paso a un carril a la salida del túnel 1 en la incorporación a la calzada existente a la altura del viaducto existente de Chirajara.
- Cierre total del tramo comprendido entre el K69+350 y el K70+780, con desvíos del tráfico unidireccional entre el K54+000 y el K72+000 o en caso de caída de material entre el K56+400 y el K56+800 a través de los túneles nuevos entre el peaje de Naranjal y la Intersección Mesagrande.
Es importante que los usuarios de la vía, especialmente los conductores de vehículos de transporte de pasajeros y de uso particular, estén preparados para enfrentar estos cierres y restricciones. En caso de cierre, se recomienda buscar un sitio seguro que garantice los servicios de alimentación y sanitarios mientras se habilita nuevamente el paso. Por otro lado, los conductores de vehículos de carga deben asegurarse de mantener las vías sin obstrucción de los carriles, ocupando la berma en calzadas bidireccionales y manteniendo siempre libre el carril izquierdo en calzadas unidireccionales.
La Fase 4A del Plan de Contingencia Operativa representa un avance significativo en la recuperación de la Vía Bogotá-Villavicencio, una arteria vial vital para la conectividad del país. No obstante, es esencial que tanto conductores como empresas se adhieran rigurosamente a las regulaciones establecidas para garantizar la seguridad de todos los usuarios y minimizar los riesgos asociados.
Esta noticia marca un importante paso hacia la normalización del tráfico en esta vía estratégica. Sin embargo, no podemos perder de vista que aún persisten desafíos considerables en términos de infraestructura y seguridad. La cooperación de todos los actores involucrados será fundamental para mantener un tránsito fluido y seguro en esta carretera.