Los retos de Viva Colombia con la llegada de Wingo
El turismo en el país, de la mano de la conectividad aérea, está siendo catapultado por cuenta de la paz y varias medidas oficiales que hacen más atractivo ese negocio en Colombia.
Ese es el caso de la aerolínea de bajo costo, Viva Colombia, que el año pasado registró un crecimiento en movilización de pasajeros del 17% con 3,4 millones de personas y espera que, al cierre de este año, pueda transportar a más de 5 millones de pasajeros.
William Shaw, presidente de Viva Colombia, habló con Portafolio sobre los retos que tiene el transporte aéreo en el país para el 2017 y sobre el modelo de negocio que ha hecho que las tarifas a los destinos a los que vuelan, se reduzcan más de un 70 %.
La Asociación del Transporte Aéreo de Colombia (Atac) dijo que los precios de los tiquetes subirían hasta un 10%, ¿Por qué ustedes decidieron rebajar sus tarifas hasta un 36%?
Entendemos a las demás aerolíneas, entendemos que con el alza del IVA va a ser más caro el tiquete aéreo para los colombianos, también, que el impuesto del carbono nos va a incrementar los costos, pero nuestra responsabilidad como aerolínea de bajo costo, es seguir bajando precios para poder seguir ofreciendo tiquetes baratos.
¿Y cómo hacen para que esos descuentos sean rentables, a pesar de dichos aumentos?
Cerramos el 2016 con aproximadamente el 85% de la ocupación de sillas. Eso significa que hay un 15 % de sillas que están todavía disponibles y esperamos este año poder llenar algunas de esos asientos. Y estamos haciendo una ‘vaca’ para pagar el combustible, y los pilotos. Y ese es el secreto de una aerolínea de bajo costo, tener factores de ocupación mayores a las aerolíneas tradicionales y lo más importante, siempre buscamos la manera de abaratar los costos a nuestros clientes. Por eso, a finales de 2016, trajimos un avión y ya estamos buscando traer tres aviones más, lo mismo en Perú.
¿Cómo ven el mercado de las aerolíneas de bajo costo con la llegada de nuevos jugadores como Wingo y de nuevas estrategias como las de Latam?
Nos encanta que otros traten de ser de bajo costo, y le damos la bienvenida a la competencia porque es la que trae tarifas más baratas. Además, nosotros fuimos quienes empezamos a implementar las tarifas de bajo costo a Colombia. Y con eso, hay lugares donde se han reducido las tarifas más de un 70% como las rutas Bogotá- Panamá y Medellín- Panamá, eso lo llamamos el “Efecto Viva”.
¿Y qué es el ‘efecto Viva’?
Eso quiere decir que nosotros llegamos con la tarifa barata a un destino y la gente quiere viajar más, porque si vale un millón de pesos un boleto a Cartagena, vas una vez al año pero si vale 100.000 pesos pues vas cinco veces. Eso causa que los competidores bajen sus tarifas también, entonces no solo se beneficia la gente que viaja en Viva Colombia, sino quienes se desplazan por en aerolíneas. Entonces, el mercado explota y los aeropuertos se quedan cada vez más chiquitos.
¿Cuáles son las rutas preferidas que más movilizaron viajeros?
Definitivamente, la más grandes son Medellín- Bogotá; Bogotá- Cali; Bogotá- Cartagena, y Bogotá- Barranquilla. Pero el negocio de Viva Colombia está en conectar ciudades intermedias que antes no tenían conexión. Claro que volamos un Bogotá- Medellín, pero lo importante es un Pereira – Cartagena, donde no había conectividad y había que, fuera de pagar una cifra millonaria por viajar en avión, tardarse mucho más tiempo en hacer las conexiones. Por eso es que en vuelo directo entre Pereira y Cartagena el número de pasajeros se incrementó en un 300 %.
¿Han estudiado más rutas a zonas que antes estaban afectadas por el conflicto?
Sí, y queremos seguir viendo el crecimiento del mercado colombiano y sentimos que con el esfuerzo que han hecho todos los colombianos por llegar a la paz, va a traer beneficios en el turismo. Y aplaudimos también los esfuerzos de la Aeronáutica Civil en incrementar y mejorar la infraestructura de los aeropuertos para adecuarlos al nuevo tamaño del mercado colombiano.
Hace poco, la Aerocivil dijo que abriría investigaciones a Viva Colombia por la cancelación de vuelos y la posible ausencia de información. ¿Qué responden ustedes ante eso?
Hasta ahora, no se nos ha notificado oficialmente de dicha investigación. Entonces estamos esperando que comience la investigación. Nosotros nos sentimos tranquilos con nuestra operación. Cabe decir también que Colombia no es un país fácil de volar, pues hay neblinas y se cierres constantes de aeropuertos por condiciones meteorológicas y hay veces se tienen que cancelar los vuelos.
¿Cuáles son los retos para este año?
Movilizar al cierre de este año más de cinco millones de pasajeros y seguir abriendo rutas a ciudades intermedias. A Colombia le falta mucho por explotar.
Fuente: Portafolio
Imagen: Archivo Portafolio