El principal efecto de la medida es frenar las alzas de precios.
La junta directiva del Banco de la República siguió subiendo sus tasas de interés de referencia, como lo viene haciendo desde el año pasado, un mecanismo que si bien se percibe lejano a la población en general, debe tener efectos en la vida diaria de la gente.
El principal efecto es frenar las alzas de los precios de la canasta familiar, que el año pasado se incrementaron en 5,62 por ciento, el ritmo más alto de los últimos cinco años.
La medida, pues, es parte de uno de sus objetivos centrales del Emisor, como lo es mantener controlada la inflación, hoy por fuera del rango meta que va del 2 al 4 por ciento así como las expectativas de un mayor aumento en este indicador de la variación de los precios al consumidor.
Se espera que se comience a ver en los próximos meses un aumento progresivo en las tasas de interés que se les reconocen a los ahorros, y también de los nuevos créditos que tomen los colombianos y las empresas, como parte del efecto natural de transmisión del fuerte ajuste en la tasa de intervención que adoptó el Banco de la República el viernes anterior, de un punto porcentual, llevándola al 4 por ciento.
Según el ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, en el caso de las decisiones de incremento de la tasa que se han tomado desde que comenzó la normalización de la política monetaria en octubre de 2021 hasta el 20 de diciembre (fecha de inicio de la vigencia de las decisiones), de 125 puntos básicos (o 1,25 por ciento) se ha visto que en la cartera hipotecaria la transmisión ha sido de 35 puntos básicos (0,35 puntos porcentuales).
De acuerdo con el funcionario, en algunos otros tipos de crédito ha estado entre los 90 y 96 puntos básicos, y esta situación no tiene un número de veces definido, pero puede tomar entre 6 y 8 meses, aproximadamente.
Sin embargo, este incremento depende del plazo de la compra y del tipo de crédito, ya que, por ejemplo, según la Superintendencia Financiera, con corte al 21 de enero, las tasas de interés de tarjeta de crédito para plazos entre 2 y 6 meses oscilaron entre el 20,98 por ciento y 26,46 por ciento, en tanto que para consumos entre 7 y 12 meses el rango estuvo entre el 20,98 por ciento y el 26,39 por ciento.
El hecho de buscar mantener controlada la inflación también contribuye a largo plazo a reducir el costo de los créditos de vivienda en UVR, cuya variación está ligada al índice de precios al consumidor (IPC).
Además, el ritmo de estos aumentos está ligado al costo del dinero que pagan las entidades en las captaciones, ya que en la medida en que van venciendo los plazos de depósitos como los CDT o sube la competencia entre entidades, algunas comienzan a ofrecer mayores tasas a sus ahorradores.
La transmisión del costo del crédito se aplica a los nuevos préstamos porque los desembolsos pasados mantienen la tasa a la que fueron pactados, según el contrato firmado entre las entidades y los clientes.
Fuente: El Tiempo
Imagen: El Tiempo
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