La reciente incomunicación vial al sur de Norte de Santander, provocada por las intensas lluvias, ha generado una situación crítica en la región. La caída de banca en el kilómetro 92 de la vía La Soberanía, específicamente en el sector de La Lejía entre Toledo y Saravena, ha resultado en la suspensión de los despachos del transporte de carga hacia el vecino departamento de Arauca.
Yamil Galeano, presidente del transporte de carga en la región, expresó su preocupación en una entrevista con Caracol Radio: “Estamos enfrentando una situación muy grave y el gobierno nacional, desde el Ministerio de Transporte y Invías, debe responder al llamado de todo el oriente del país. La situación es compleja tanto a nivel departamental como nacional con esta ola invernal que apenas comienza”.
La magnitud del problema no se limita a la interrupción del tráfico. Galeano subrayó que las vías alternas disponibles están demasiado lejos, lo que genera sobrecostos y prolongados tiempos de viaje. Además, muchas cosechas están en riesgo de perderse al no poder ser transportadas a las plazas de mercado más cercanas desde sus lugares de origen. “Tenemos en este caso vías alternas muy lejos, sobrecostos, tiempos y muchas cosechas que se empiezan a ver afectadas al no poder sacarlas ni comercializarlas en las plazas de mercado más cercanas de sus lugares de origen”, explicó el líder del sector.
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La afectación de la ruta es considerable. Se estima que más de dos mil vehículos, tanto de pasajeros como de carga, dejan de movilizarse por esta vía cada día. Galeano señaló que “la afectación siempre es grande. Con cada día de retraso las pérdidas son millonarias, porque el movimiento de carga y productos perecederos es bastante significativo”.
La suspensión del movimiento hacia el departamento de Arauca añade otra capa de complicación a la crisis. La falta de acceso a este importante corredor no solo afecta el suministro de bienes esenciales, sino que también paraliza actividades económicas críticas en la región.
La situación exige una respuesta inmediata del gobierno nacional. La región del oriente del país, que depende en gran medida de esta vía para su conectividad y comercio, necesita soluciones urgentes para mitigar el impacto de esta crisis. La intervención del Ministerio de Transporte y de Invías es crucial para reparar y asegurar la transitabilidad de la vía La Soberanía.
La crisis vial en Norte de Santander es un claro recordatorio de la vulnerabilidad de nuestra infraestructura frente a las adversidades climáticas. La respuesta rápida y efectiva del gobierno no solo aliviará la presión sobre la economía local, sino que también demostrará un compromiso con el bienestar y la seguridad de todos los colombianos afectados por esta emergencia.
Fuente: Caracol Radio
