El plan de ‘revolcón’ de aranceles no convence mucho a empresarios
El trabajo que durante más de un año realizó Juan José Echavarría, antes de convertirse en el nuevo gerente del Banco de la República para el periodo 2017-2021, y que fue encomendado por el Gobierno Nacional para buscar una profunda reforma al arancel de aduanas, no terminó por convencer a los empresarios que participaron en las reuniones donde se puso el tema sobre la mesa.
En ese documento, la dispersión en los aranceles y el contrabando técnico eran dos de las mayores preocupaciones que fueron materia de estudio por parte de Echavarría, junto con técnicos del Ministerio de Comercio y del sector privado.
Y en ese sentido, según los expertos, una consecuencia de un arancel disperso, es que conlleva al contrabando técnico, que ocurre cuando se importa un bien por una partida que no corresponde, aunque sean parecidos, pero tienen aranceles diferentes.
Aspectos en los que todos coinciden por su importancia, pero de acuerdo con Javier Díaz, presidente de Analdex, donde radica el problema es que el estudio que hizo Juan José Echavarría mira toda la parte arancelaria por capítulos del arancel y por partidas arancelarias.
Sin embargo, cuando se reunieron con los gremios a debatir el contenido del documento, se discutió que era fundamental mirar el tema más bien por el lado de las cadenas productivas.
“Particularmente nos preocupa que este estudio o la modificación arancelaria solo haga mención de la parte industrial, porque muchas de las cadenas industriales tienen su origen en la parte agrícola”, señaló Díaz.
Razón por la que sostiene que si van a mover los aranceles, se debe mirar el conjunto, porque si no, puede ocurrir que no le bajan los aranceles al producto industrial. Como ese producto nace en un eslabón agrícola, lo que va a terminar haciendo es que la materia prima queda con un arancel alto y al producto terminado sí le bajan el arancel.
“Entonces viene un problema ahí de protección efectiva negativa, donde resulta mejor traer el producto final, en lugar de fabricarlo en el país, porque la materia prima tiene un arancel; cuando entramos en ese tema nos enredamos, porque Juan José decía que él no tenía el estudio por el tema de cadenas y, además, porque es algo muy complicado para determinar cuántas son y que por eso él no lo había organizado de esa manera. Ahí empezamos a mirar algunas cosas, pero no avanzó mucho más que eso”, afirmó Javier Díaz.
Lo que viene
Y pensando en el futuro de esa reforma y hacia dónde va ese ‘revolcón’, el presidente de Analdex dijo que lo que hizo el Gobierno fue mantener y prorrogar el cero por ciento de arancel para la maquinaria de las materias primas no producidas en el país y que eso fue lo que se recogió en Colombia Repunta, pero no va más allá.
Para él, ya lo que suceda de ahora en adelante con el desarrollo de esta discusión está en manos del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, pero eso depende de que esa cartera tome la iniciativa para que se vuelvan a sentar a la mesa el Gobierno y los empresarios, para ponerse de acuerdo y discutir a fondo, según Díaz, el tema de las cadenas y de todo el universo arancelario, porque esto no se puede reducir solo a la parte industrial, y hay que ligarlo en su conjunto con lo agrícola.
“El Ministerio de Comercio tiene bajo su paraguas el tema industrial, pero uno tendría que sentarse también con el Ministerio de Agricultura, y ahí no se ha avanzado”, advirtió Díaz.
Sobre este tema, la ministra de Comercio, María Claudia Lacouture, manifestó que efectivamente están trabajando en la posibilidad de generar una reforma que dé posibilidad de tener mayor competitividad, y al mismo tiempo que se pueda reducir la dispersión que existe en la estructura arancelaria.
“Si logramos establecer un proceso que permita el mejoramiento de esta dispersión y que también reduzca la subfacturación como el contrabando técnico, ese sería el principal objetivo para desarrollar”, explicó Lacouture.
De otro lado, para el exministro de Comercio Carlos Ronderos el informe de Juan José Echavarría va encaminado a algo que Colombia está en mora de hacer y que es lo llaman ‘aplanar’ la estructura arancelaria.
“En el país esa estructura es escalonada y las de su clase están diseñadas como mecanismos de protección, por ejemplo, usted puede traer las autopartes sin arancel, pero el carro con 35 por ciento de arancel, lo que favorece en ciertos momentos del proceso productivo”, afirmó Ronderos.
El exministro considera que lo que contiene la propuesta de Echavarría era tendiente a aplanar lo más posible y que todas las partidas quedaran más o menos en los mismos aranceles, y de eso se acogió lo anunciado por la ministra Lacouture y el ministro de Hacienda hace poco, que les quitaron los aranceles a una cantidad de bienes intermedios y de capital que no se producían en el país.
“Pero digamos que lo de fondo para cambiar el esquema estructural tuvo una gran oposición de parte de la Andi y de los sectores productivos, porque obviamente expone de una mayor manera a las empresas a la competencia internacional”, dijo Ronderos.
Agregó que así las cosas, y más allá de lo que se hizo y se anunció con ocasión de la reforma tributaria por parte de los ministros de Hacienda y Comercio de unas desgravaciones arancelarias, él no cree que se vaya a implementar “absolutamente nada en lo que resta de este Gobierno”.
Lo que significa que el gran ‘revolcón’ en la estructura arancelaria que trabajó Juan José Echavarría por ahora no va, según el exministro Ronderos.
Fuente: El Tiempo Noticias
Imagen: Archivo El Tiempo Noticias