7 de cada 10 proyectos de las vías 4 G avanzan según lo programadoDe las iniciativas que ya están en obra, la mayoría se encuentran al día en actividades, según Anif.
Mientras que varios proyectos viales de cuarta generación (vías 4G) enfrentan dificultades para completar su esquema de financiamiento, el desarrollo de las 32 concesiones muestra que si bien 7 de cada 10 proyectos avanzan según lo previsto, el 28 por ciento de estos, es decir, 9 iniciativas, registraron, al corte de junio, atrasos debido a factores que no fueron abordados para evitar complicaciones.
Según el centro de estudios económicos Anif, por desgracia, el Estado solo asumió parcialmente actividades claves para que las obras se ejecuten sin tropiezos, como la adquisición de predios y la obtención de licencias ambientales, que se han visto afectadas por consultas territoriales en proyectos mineros, pero que podrían extenderse a las obras de infraestructura dependiendo de la interpretación de los fallos de la Corte Constitucional. Además, la llamada licencia social o las negociaciones con las comunidades (consulta previa) se están convirtiendo en focos de extorsión al Estado, advierte la entidad. El análisis alerta que de esas 32 concesiones, 11 estaban a junio en fase de preconstrucción (en la cual se hacen los trámites mencionados) y el 60 por ciento registran atrasos importantes y necesitan prórrogas en su ejecución (siete proyectos). Por ejemplo, uno de los casos de mayor complejidad ha sido el del proyecto Mulaló-Loboguerrero, en el Valle del Cauca, afectado por asuntos de consulta previa con las comunidades que apenas se resolvieron a mediados del año, casi dos años después de haber sido adjudicados. Similar situación enfrenta la vía 4G Villavicencio-Yopal, en la que hay controversias técnicas entre la ANI y el concesionario por los diseños de las obras, al igual que la Malla Vial del Meta, donde el fin del auge petrolero también ha implicado controversias entre el concesionario y la dicha agencia, producto de probables disminuciones en las estimaciones de tráfico futuro. En este grupo, 4 proyectos cumplían a junio las actividades previstas en el cronograma, siendo los más destacados la vía Bucaramanga-Pamplona y las iniciativas privadas de Buga-Buenaventura (por 1,2 billones de pesos) y el tercer carril de la vía Bogotá-Girardot (obra de 2 billones de pesos adjudicada a un consorcio liderado por Conconcreto).
En cuanto a las concesiones cuya construcción está en marcha, la mayoría de los proyectos (17 de 19) cumplen su cronograma de avance. Allí, las ejecuciones se ubican entre el 0 y el 30 por ciento, registrándose, según la Anif, logros importantes en los proyectos de la primera ola de concesiones (adjudicada en 2014 y 2015), y cuya estimación de cierre de obras está entre 2018 y 2020). Anif destaca el grado de ejecución de los proyectos Girardot-Honda-Puerto Salgar (31 por ciento), Cartagena-Barranquilla (27 por ciento) y las autopistas Conexión Pacífico 2 y Pacífico 3 (16 y 14 por ciento). Con algo de menor avance aparecen los proyectos de la Perimetral Oriente, en Cundinamarca, con un 10 por ciento, y también los de la primera ola y la vía Girardot-Ibagué-Cajamarca, de iniciativa privada, con 11 por ciento. Los proyectos que enfrentan atrasos en su fase de construcción son la vía Cesar-Guajira (iniciativa privada), en el que las demoras en sus trámites de consultas previas (vía prohibición de cobro de peajes por la Corte Suprema) solo dejaron avanzar las obras un 4,4 por ciento a junio, lo cual desembocó en que el concesionario y la ANI acordaran acabar el contrato, pues no había recursos para financiarlo, al no poder instalar el peaje. Otro que ha tenido inconvenientes en su ejecución es el proyecto Pasto-Rumichaca, con problemas de consulta previa y licenciamientos, que han llevado a que su ejecución sea del 0,2 por ciento.
Fuente: El Tiempo Imagen: Archivo El Tiempo Ver artículo original ]]>