Entrada de Colombia a la Ocde estaría perdida por la chatarrizaciónCon la apropiación de 150.000 millones de pesos para el programa, gremios señalan que su culminación todavía tardaría dos años más.
un cuando Estados Unidos exigió que el programa de chatarrización termine en menos de dos meses, este podría demorarse incluso dos años más.
De hecho, en las cuentas hechas por el Ministerio de Hacienda, esta meta sería imposible de cumplir para abril, fecha en la que el gobierno norteamericano solicitó su finalización, como condición de aceptar a Colombia en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde). Aun cuando Estados Unidos exigió que el programa de chatarrización termine en menos de dos meses, este podría demorarse incluso dos años más.
De hecho, en las cuentas hechas por el Ministerio de Hacienda, esta meta sería imposible de cumplir para abril, fecha en la que el gobierno norteamericano solicitó su finalización, como condición de aceptar a Colombia en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde). El problema mayor para no lograr dicho objetivo, tiene detrás el rezago en el llamado programa ‘1 a 1’ de Mintransporte, que consiste en que por cada vehículo de carga que entre al parque automotor, uno viejo sea desintegrado.
La razón de este déficit es que si bien hay $1,1 billones aprobados hace unos años por un Conpes, los cuales se irían desembolsando año tras año, el total aprobado es de casi $550.000 millones, es decir, el 50 por ciento.
Juan Carlos Rodríguez, presidente de la Federación Colombiana de Transportadores de Carga y su Logística (Colfecar), explicó que “desde el 2013 se vienen desembolsando los recursos, pero por ejemplo el año pasado estos se recortaron, ya que inicialmente se dispuso que se iban a girar $250.000 millones, pero Hacienda solo giró $150.000 millones, de los cuales supimos que apenas se ejecutó el 51 por ciento”.
Y, en efecto, según datos del Ministerio de Transporte, en el 2017 se ejecutaron $76.656 millones, cifra que venía superando el 90 por ciento en años anteriores.
De igual forma, las previsiones hechas en el Conpes señalaban que, para el 2017, la meta era desintegrar al menos 3.600 tractocamiones, de los cuales se logró el 55,6 por ciento, es decir un poco más de 2.000 vehículos.
Por su parte, Henry Cárdenas, presidente del gremio Fedetranscarga, indicó que: “Estamos muy preocupados porque el presupuesto nacional que tenía Colombia para lo que resta del programa supera los $500.000 millones de pesos, y ahora nos anuncian que este año nos avalaron 150.000 millones, lo que da apenas para sacar 1.578 tractomulas del mercado”.
Y agregó que el ‘chicharrón’ “prácticamente ya quedó para el otro Gobierno, que tendrá que encontrarle un salida al tema, sobre todo porque hay más o menos 20.000 carros que deben chatarrizarse, ya que cumplieron su tiempo de uso”.
De allí, Cárdenas asegura que lo más probable es que no culmine el ‘1 a 1’ este año, con lo cual –vale señalar– está de acuerdo.
Este programa está previsto que culmine el 31 de diciembre del 2018, tal y como quedó escrito en un decreto del Ministerio de Transporte, fecha que sería imposible de cumplir y que, incluso, se extendería hasta el 2020.
“Como el desembolso de recursos no ha ocurrido al ritmo esperado y a la vigencia 2018 le faltan $100.000 millones, se necesitarían vigencias futuras y expiradas, pero aun así, el programa no se cerraría sino hasta el 2020, porque no creo que al ritmo que va se alcance terminar este año”, concluyó el directivo de Colfecar.
El tema cobra más preponderancia, debido al interés de Colombia de ingresar a la Ocde, el cual se vería truncado, además, por temas de comercio y laborales.