Vías 4G: el ambiente empieza a mejorar
El plan de inversiones viales 4G pasa por uno de sus momentos más críticos. La banca le cerró la puerta a los créditos y buena parte de los contratos presentan algún tipo de atraso o sobrecosto. La buena noticia es que el ambiente parece mejorar.
En las modernas oficinas de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) hay una maratón de visitas por estos días. Varios representantes de los concesionarios se vienen reuniendo con delegados del gobierno para ir definiendo soluciones que ayuden a acelerar la locomotora de la infraestructura.
El ambiente entre gobierno y sector privado empieza a mejorar luego del tormentoso escándalo de corrupción de Odebrecht que terminó por afectar los cimientos de toda la institucionalidad del sector transporte.
“Cada proyecto tiene problemas distintos. Por ejemplo, en nuestro proyecto de Conexión Norte (Remedios – Zaragoza – Caucasia), el mayor lío está asociado al orden público”, comenta Menzel Amín, presidente de KMA, una de las firmas que componen el consorcio.
Este proyecto no solo presentó problemas asociados a licencias y redes de servicios públicos, también ha sido víctima de la quema de maquinaria por grupos al margen de la Ley.
En la actualidad ya hay mesas de trabajo con el Ejército para garantizar la seguridad de las zonas donde hay obra. Sin embargo, buena parte del daño está hecho y por eso se buscan soluciones que pasan por más tiempo para entregar las obras, y en algunos proyectos, más dinero.
“Ya tiene claro (gobierno) que hay hechos de eximente responsabilidad por parte del concesionario y que es necesario resolver los problemas”, apuntó Amín.
En el caso del proyecto Conexión Norte, el concesionario pide prórrogas en tiempo de 210 días en algunas obras o tramos (unidad funcional).
En otro proyecto 4G donde participa la compañía, Sisga – Guateque – El Secreto, el problema no es de orden público, es predial. En los estudios iniciales se había concluido que se requerían 5 predios, pero análisis posteriores de las firmas de ingeniería determinaron que se requerían 550 predios. Ese desfase tan grande se tendría que resolver económicamente entre las partes.
“El tema es tomar ese tipo de decisiones en un ambiente en el que uno de los expresidentes de la ANI, Luis Fernando Andrade, tiene la casa por cárcel y hay sindicaciones contra otro grupo importante de empresarios. Debe haber un gran acuerdo de acompañamiento con la Procuraduría y Contraloría para evitar que se frene todo”, dijo otro constructor que prefirió no divulgar su nombre.
Aunque todavía no se habla de negociaciones sino más bien de diálogo y etapa de explicaciones, se espera que antes del Congreso de Infraestructura de finales de noviembre en Cartagena, ya haya una hoja de ruta trazada por el gobierno para solucionar los entuertos.
Por el lado de la ANI se sabe que es necesario tomar decisiones para destrabar todo. El tema pasa por acciones diferenciadas que permitan que cada proyecto vuelva a tomar impulso. Sin embargo, son tantos los chicharrones y proyectos que es difícil darle una pronta solución a todos.
En la banca nacional las cosas tampoco está resueltas. Aunque aun se mantiene un interés para participar en proyectos de infraestructura, algunos de los bancos más grandes van a esperar hasta tanto el asunto Odebrecht se despeje un poco más. Casos como Solarte, Corficolombiana, Conalvías y Conconcreto, tienen preocupado a más de un alto ejecutivo del sector financiero.
Es necesario tomar decisiones de inmediato que conduzcan a reactivar el sector y jalonar la economía. Ojalá estas decisiones se tomen con el visto bueno de las autoridades para que los funcionarios nuevos del Gobierno Duque se sientan respaldados y blindados, pero también para proteger el erario frente a hechos de corrupción.
También porque no todo es 4G. Otras APP y proyectos hacen su tránsito por las dependencias de la ANI. El trancón parece que pasó de las vías a las oficinas de Ciudad Salitre en Bogotá.
Fuente: Revista Dinero
Imagen: Revista Dinero
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