Aerolíneas protestan al Gobierno por nuevos cobros
Colombia es el segundo país, después de Venezuela, que más impuestos tiene en los tiquetes aéreos.
Y es que la mitad del precio total de un tiquete son cargas impositivas, según cálculos de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (Iata, por sus siglas en inglés).
La preocupación, que ha sido manifestada en varias ocasiones por los representantes del gremio aéreo, se agravó hace varios días cuando el Gobierno anunció la reglamentación de una resolución que dice que todas las personas que pasen por el aeropuerto de Rionegro tienen que pagar una tasa para financiar las obras viales del Túnel de Oriente en Antioquia.
De hecho, a través de un derecho de petición, dirigido al director de la Aerocivil, Alfredo Bocanegra y al gobernador de Antioquia, Luis Pérez, la Asociación de Transporte Aéreo de Colombia, respaldada por los presidentes de Avianca, Viva Colombia, Latam, Copa Airlines, American Airlines, ADA y Satena, le solicitaron a la entidad suspender ese cobro.
La tarifa, que según describe la Aerocivil no es otro impuesto sino un “derecho a la conectividad” que tendría que ser recaudado por las aerolíneas que operen en esa terminal.
“Las compañías aéreas no están en condiciones administrativas ni financieras para llevar a cabo el recaudo de la tasa, pues de la forma que se está planteando en el procedimiento de la resolución, son las empresas aéreas las que deben asumir los costos administrativos, asociados al recaudo, tales como infraestructura, papelería, recurso humano, gravamen al movimiento financiero, etcétera”, explica en un apartado del derecho de petición al que tuvo acceso Portafolio.
Por su parte, este diario consultó a la Aerocivil quien aseguró que evaluaría el derecho de petición para dar pronta respuesta. Sin embargo, reiteró sus argumentos frente a dicha tarifa.
“A diferencia de la tasa aeroportuaria, que está destinada para mejorar la infraestructura de las terminales, el derecho a la conectividad no tiene previamente establecido una destinación específica, sino que, de manera general redunden en la mejora del servicio de transporte aéreo”, dice la Aerocivil en un documento que conoció Portafolio.
La Atac, además del derecho de petición, el pasado 28 de febrero radicó una demanda ante el Consejo de Estado para que se anulara la resolución que le da luz verde a la tasa. Y la Aerocivil sostiene en que la medida es legítima y goza de todo el “respaldo jurídico y técnico”, además de que sería una tarifa temporal que duraría seis años, o hasta que se completen los recursos que deben ser recaudados para financiar las obras del Túnel de Oriente.
“Mientras la discusión se soluciona, finalmente los más afectados serán los pasajeros”, concluyó Gilberto Salcedo, presidente de la Atac.
Otros cobros que afectan la competitividad
La Asociación de Transporte Aéreo de Colombia dice que el exceso de carga tributaria afecta directamente en la pérdida de competitividad de Colombia como destino turístico.
Y si se tiene en cuenta que el combustible de aviación es aproximadamente el 30% de los costos de una aerolínea, la variación que éste sufre con el impuesto al carbono incrementaría la brecha ya existente frente a otros destinos que compiten por el tráfico de turistas en la región en un 17%.
Además, la asociación argumenta que entre 2010 y 2016 y lo que va corrido de este año, los costos operativos de las aerolíneas se han incrementado en un 30%.
Y mientras los impuestos a los tiquetes y los cargos aeroportuarios se incrementan, argumenta la entidad, la infraestructura sigue rezagada.
Fuente: Portafolio
Imagen: Archivo Portafolio