El transporte representa aproximadamente el 24 % de las emisiones mundiales de CO2 derivadas de la combustión de combustibles fósiles, siendo una de las principales fuentes de gases de efecto invernadero (GEI). En un país como Colombia, donde la geografía desafía la movilidad y la eficiencia logística, el transporte intermodal emerge como una solución viable y sostenible para reducir el impacto ambiental y mejorar la eficiencia.
Pepe Baena, profesor de OBS Business School, analiza las oportunidades y beneficios del modelo intermodal en Colombia, destacando cómo este enfoque puede transformar el panorama del transporte en el país.
El sistema ferroviario en Colombia: Desafíos y oportunidades
Actualmente, el sistema ferroviario colombiano enfrenta importantes limitaciones en infraestructura y conectividad. Las líneas férreas existentes, como el corredor central y la red del Caribe, están mayormente destinadas al transporte de carga, especialmente en sectores como el carbón y otros bienes industriales. Sin embargo, la integración de estas líneas con otros modos de transporte es limitada, restringiendo el potencial del modelo intermodal.
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El gobierno nacional ha priorizado la revitalización del sistema ferroviario, anunciando en abril de 2024 una ambiciosa inversión de $44.2 billones para mejorar las vías ferroviarias. Esta inversión busca facilitar tanto la exportación de alimentos como el transporte de personas, sentando las bases para un futuro intermodal.
Beneficios del transporte intermodal
Adoptar un enfoque intermodal trae múltiples ventajas tanto para el medio ambiente como para la economía, según Baena:
- Reducción de emisiones contaminantes: Priorizar modos de transporte más limpios como trenes y barcos disminuye el impacto ambiental comparado con el uso exclusivo de camiones.
- Eficiencia logística: La combinación de diferentes medios de transporte optimiza los tiempos de entrega y reduce los costos operativos.
- Competitividad empresarial: Las empresas que adoptan estrategias intermodales pueden ofrecer mejores precios y tiempos a sus clientes, fortaleciendo su posición en el mercado global.
“El transporte ferroviario intermodal surge como una solución eficaz para reducir las emisiones de carbono. Este enfoque combina diferentes modos de transporte, como ferrocarril y carretera, optimizando el consumo energético y minimizando las emisiones de GEI. El ferrocarril consume apenas 0,05-0,1 litros de combustible por tonelada-kilómetro, en comparación con los 0,2-0,5 litros de los camiones, y su eficiencia se incrementa en sistemas electrificados, que no emiten CO2 directo cuando utilizan energía renovable”, afirma Baena.
Inversiones necesarias para un futuro intermodal
La transición hacia un sistema intermodal requiere inversiones significativas en infraestructura. Baena señala la necesidad de construir terminales intermodales modernas y robustecer las conexiones ferroviarias existentes. La colaboración público-privada y las políticas que fomenten inversiones en tecnología también son esenciales.
“Es necesario invertir en tecnologías energéticamente eficientes, locomotoras eficaces en combustible y equipos ecológicos que reduzcan el consumo de combustible y las emisiones en las operaciones intermodales. La transición a combustibles alternativos como el gas natural, los biocombustibles o la energía eléctrica también es crucial”, explica Baena. Además, la implementación de sistemas de gestión de flotas, plataformas de análisis de datos y soluciones digitales para la sincronización de rutas optimizará los recursos y ofrecerá servicios más efectivos.
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Desafíos del sistema ferroviario en Colombia
El sistema ferroviario colombiano enfrenta varios desafíos:
- Falta de infraestructura operativa: Solo 1.074 kilómetros de la red ferroviaria están operativos, limitando la capacidad de transporte.
- Convencimiento de nuevos usuarios: Atraer usuarios al tren y aumentar la carga transportada son retos significativos.
- Condiciones tecnológicas: La infraestructura existente es obsoleta y requiere modernización para ser competitiva.
- Dependencia del transporte por carretera: La cultura del transporte por carretera está muy arraigada en Colombia, lo que dificulta la aceptación del tren como alternativa viable.
Un modelo de transporte sostenible
“La visión a largo plazo para el transporte intermodal implica la creación de una red logística global integrada, sostenible y eficiente. Esto requiere innovación continua, inversión y apoyo a las políticas”, concluye Baena. Las innovaciones futuras se centrarán en la automatización, digitalización y desarrollo de centros logísticos inteligentes, marcando un camino claro hacia un modelo más sostenible y competitivo para Colombia.
Fuente: LNE
