Fedetranscarga pide al Gobierno claridad sobre recursos girados a la APP con concesiones y peajes. ATC dice que los camioneros son los que tienen menos utilidades.
El inconformismo de los transportadores de carga terrestre, en especial de los camioneros, por la primera alza y progresiva de los peajes nacionales para el 2024 ha reavivado el debate sobre cómo equilibrar los costos que genera esta actividad económica del país.
Anderson Quiceno, presidente de la Asociación de Transportadores de Carga (ATC), una de las cinco agremiaciones de este sector en Colombia, indicó que las primeras alzas están siendo asumidas como pérdidas para este primer mes del año por parte de los conductores.
La cadena del transporte la integran el dueño de la mercancía que viaja por las vías del país hacia los centros de acopios y destinos, las empresas de transportes (solo el 15 % del país son dueños de camiones, según la ATC) que contratan a los camioneros (unos 385.000 en Colombia) y quienes con lo que le llaman “flete pactado” con la compañía transportadora prestan el servicio.
“Los camioneros no participan en la negociación o contrato entre el dueño de la mercancía y la empresa de transporte. El flete es el que se da entre la empresa de transporte y el dueño de mercancía. El pago que hacen las empresas de transporte a los dueños de los camiones no se llama fletes, se llama valor total a pagar; es decir ni siquiera por ley está contemplado como flete. Entonces ese valor total a pagar es el que está registrado prácticamente y está por debajo del costo eficiente”, indicó Quiceno.
El Gobierno nacional, que determinó para el 2024 un alza del 13,12 % en las tarifas de los peajes y después de mantenerlos congelados en el 2023, no tuvo en cuenta consideraciones económicas, sociales ni jurídicas, ni las consecuencias para el sector de transporte, dijo Arnulfo Cuervo, vicepresidente de Fedetranscarga. El dirigente gremial agregó que piden claridad sobre los recursos girados por el Gobierno a las alianzas público privadas (APP) que tienen concesiones de peajes, porque el alza de los mismos podría “no tener sustento”.
“Cuando se tomó la decisión de congelar los cobros de los peajes y se anunció que al volver a activarse no iba afectar a los transportadores, hoy se está revirtiendo”.
Cuervo señaló que los aumentos aprobados no reflejan la realidad. Sobre el IPC del 13,12 % correspondiente a 2022 y teniendo en cuenta que para el segundo semestre de este año se anuncia un aumento cercano al 10 %, los incrementos sumarían un 23 % que implican elevar los costos operativos más el 5 % y 15 % que ya pesan en los peajes. “Si a esto le sumamos el 40 % que pesan los combustibles sumaría un 60 % de costos operativos”.
La ATC señaló que el Gobierno no ha tenido en cuenta la solicitud de los camioneros de incluir en el incremento de los peajes al sector transportador de carga repartir el costo entre todos los integrantes de la cadena.
La propuesta de los camioneros es que se aplique una “medida tecnificada”, se incluya en el pago de los peajes un costo que asuman los dueños de las mercancías y empresas de transporte.
“Lo que buscamos es que no haya especulación. Como solo un 15 % de las empresas de transporte de carga del país tienen flota debe salir a contratar camiones y conductores. En esta relación hay una necesidad, de ganarse unos pesos y como no tienen financiación propia el transportador termina con tres o cuatro meses del año asumiendo esas alzas de peaje en su utilidad”, indicó Anderson Quiceno.
Alfonso Medrano, presidente de la Cámara Intergremial del Transporte y la Asociación Colombiana de Camioneros, agregó que el aumento de los peajes tendrán que trasladarlo las empresas y también impactarán al usuario final. “Realmente no sabemos con este Gobierno qué pasará con los incrementos. Que sí, que no, y el primer sector que se resiente es el del transporte que tiene que trasladar los costos y al usuario final”.
Fuente: El Heraldo
Imagen: Portafolio