Este lunes 8 de junio, en un acto cargado de expectativas y desafíos, el presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, posesionó a la ingeniera María Constanza García Alicastro como la nueva ministra de Transporte de Colombia. García Alicastro, ingeniera civil de la Universidad de La Salle y especialista en Transporte de la Universidad Nacional de Colombia, reemplaza a William Camargo, quien estuvo al frente de la cartera durante poco más de un año.
La nueva ministra cuenta con un vasto recorrido profesional de más de 20 años en el sector público, destacándose por su dedicación en la planeación, formulación, estructuración, diseño e implementación de proyectos de infraestructura, transporte y movilidad urbana sostenible. Su currículum incluye cargos de gran relevancia, como viceministra de infraestructura del Ministerio de Transporte, directora del Instituto Nacional de Vías (Invías), secretaria distrital de movilidad de Bogotá, y directora técnica de proyectos del Instituto de Desarrollo Urbano (IDU). Además, ha trabajado como consultora para diversas entidades públicas y privadas.
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García Alicastro asume la cartera en un momento crucial para el país, con una serie de desafíos encomendados directamente por el presidente Petro. Entre estos se encuentran:
- Intervención y Mejoramiento de Vías Terciarias: Una necesidad urgente para mejorar la conectividad en las zonas rurales del país, facilitando el transporte de productos agrícolas y mejorando la calidad de vida de las comunidades.
- Reactivación del Transporte Férreo: Un proyecto que busca revitalizar la red ferroviaria del país, potenciando una alternativa de transporte más sostenible y eficiente.
- Aeropuertos para Servicios Aéreos Esenciales: La puesta en marcha de infraestructuras que garanticen la conectividad aérea en regiones apartadas, impulsando el desarrollo regional.
- Transición Energética: En línea con los compromisos ambientales del país, el ministerio deberá liderar la transición hacia un transporte más limpio y sostenible.
- Recaudo por Valorización: Un mecanismo para financiar proyectos de infraestructura a través de contribuciones de los beneficiarios directos.
- Funcionamiento del Instituto Nacional de Vías Regionales (Invir): Asegurar la operatividad y eficiencia de este nuevo organismo.
- Alternativas para el Corredor Soacha-Bogotá: Propuestas para mejorar uno de los tramos más congestionados y críticos de la movilidad en la capital.
Desde los gremios y sectores involucrados, las expectativas son altas. Juan Martín Caicedo, presidente de la Cámara Colombiana de Infraestructura (CCI), enfatizó la importancia de mantener y garantizar el modelo de Alianza Público-Privada (APP), el ajuste de peajes conforme al IPC de 2023 y la relevancia de la infraestructura como motor de la economía. Caicedo también destacó la necesidad de preservar la confianza inversionista y la seguridad jurídica en el sector, elementos fundamentales para el desarrollo sostenible del país.
Nidia Hernández Jiménez, presidente ejecutiva de Colfecar, resaltó los múltiples frentes en los que García Alicastro deberá trabajar. Entre estos, mencionó la infraestructura vial, el cumplimiento del Sice Tac, la renovación del parque automotor, y la seguridad vial. Además, indicó que la ministra podría interceder en temas como los bloqueos y la inseguridad en las vías nacionales, colaborando con otros ministerios clave como el de Defensa, Interior, Hacienda y Comercio.
La designación de María Constanza García Alicastro como ministra de Transporte representa una oportunidad para impulsar cambios significativos en la infraestructura y movilidad del país. Su experiencia y trayectoria sugieren una capacidad comprobada para liderar proyectos complejos y gestionar recursos de manera eficiente. Sin embargo, los desafíos que enfrenta no son menores y requerirán de una visión estratégica y un trabajo colaborativo con diversos sectores y entidades gubernamentales.
La intervención en vías terciarias y la reactivación del transporte férreo son proyectos que podrían transformar la conectividad y la economía regional, mientras que la transición energética en el sector transporte es un paso crucial hacia la sostenibilidad ambiental. La implementación de aeropuertos para servicios aéreos esenciales promete mejorar la accesibilidad en regiones remotas, fomentando el desarrollo regional.
No obstante, para lograr estos objetivos, es fundamental que la ministra establezca un diálogo abierto y constructivo con los gremios y actores del sector. La colaboración público-privada será clave para garantizar la financiación y ejecución de los proyectos más ambiciosos. Además, es imperativo que se mantenga un enfoque en la seguridad jurídica y la confianza inversionista, elementos esenciales para atraer y retener inversiones en infraestructura.
El nombramiento de María Constanza García Alicastro como ministra de Transporte marca el inicio de una nueva etapa para la infraestructura y movilidad en Colombia. Con una combinación de experiencia técnica y capacidad de gestión, García Alicastro está bien posicionada para enfrentar los desafíos que se avecinan. Sin embargo, el éxito de su gestión dependerá en gran medida de su capacidad para articular esfuerzos con otros sectores y niveles de gobierno, y de su habilidad para implementar soluciones innovadoras y sostenibles.
La mirada está puesta en ella, y el país espera que bajo su liderazgo, el Ministerio de Transporte pueda avanzar en la construcción de un sistema de movilidad más eficiente, seguro y sostenible, que contribuya al desarrollo económico y social de Colombia.
Fuente: Portafolio