Transporte

Abusos de taxistas, un lío de no acabar

Dairo Vanegas, lector de EL COLOMBIANO, denunció que el pasado martes 24 de noviembre su mamá y sus hermanas fueron agredidas por un taxista a quien le habían solicitado una carrera desde el acopio ubicado en la estación del Metro Aguacatala hasta el centro comercial Oviedo. Manifestó a través de las redes sociales de EL […]

Dairo Vanegas, lector de EL COLOMBIANO, denunció que el pasado martes 24 de noviembre su mamá y sus hermanas fueron agredidas por un taxista a quien le habían solicitado una carrera desde el acopio ubicado en la estación del Metro Aguacatala hasta el centro comercial Oviedo.

Manifestó a través de las redes sociales de EL COLOMBIANO que el conductor se negó a llevarlas a su destino y las agredió físicamente pues no se percató del dinero de la carrera que le dejaron en el asiento.

“El taxista se bajó del vehículo insultó y golpeó a mi mamá y a mi hermanas, solo detuvo su agresión cuando otras personas se acercaron a controlar la situación”, aseguró Vanegas.

Denuncias de este tipo y otros abusos como taxímetro adulterado, que los taxistas se nieguen a hacer carreras o cobros de más llegaron a través de Facebook.

“Una noche cogí un taxi del parque Lleras a Manrique Central… El taxista me cobró más de lo que indicaba el taxímetro argumentando que él trabajaba en el sur y que debía devolverse solo desde allí”, comentó Carlos Osorio.

Por su parte, Alba Gladys Fernández relató que recientemente varios taxistas se negaron a llevarla a Buenos Aires. “Y varias veces cobran más de lo que indica el taxímetro”, indicó la usuaria.

Sin embargo, según la ley 1383 del Código Nacional de Tránsito, este tipo de conductas pueden acarrear costosas multas para el taxista. Por ejemplo, negarse a prestar el servicio público sin causa justificada, y que dicha negativa cause alteración del orden público conlleva una multa de 45 SLMV o conducir con el taxímetro dañado también es multado con 15 SLMV.

Diego Alberto Mejía, vicepresidente de la asociación Taxistas unidos, aseguró que es necesario que las personas víctimas de abuso hagan la denuncia ante la empresa de taxis o a la Secretaría de Movilidad, con nombre del conductor, placa del taxi y empresa.

Mejía afirmó que su trabajo está encaminado a que las empresas de taxis hagan un control sobre las tarifas, el buen servicio y el personal contratado. Sin embargo, sostiene que “en el momento no hay ninguna empresa que haga este control. Las empresas de servicio público son simplemente afiliadoras de vehículos”, por eso, recomendó hacer la denuncia ante la Secretaría.

Fabián Quintero, presidente de Tax Individual, considera que no se puede generalizar a los taxistas ni a las empresas de transporte. “En el caso concreto de nosotros existe un manual de convivencia donde regulamos toda la operación que tenemos y cómo debemos atender a los usuarios”, además la ciudadanía debe denunciar ante las autoridades los casos concretos para poder tomar los correctivos.

Falta de denuncia

Al poco control que ejercen las empresas sobre el servicio que prestan los conductores, según aclaró Diego Alberto Mejía, quien también es veedor ciudadano de movilidad, se suma la falta de denuncias concretas que impide se lleven a cabo las sanciones a los taxistas.

Por ejemplo, de las 243 denuncias que llegaron al Facebook de EL COLOMBIANO, cerca de 20 eran quejas del transporte en Envigado, sin embargo, al consultar en la Secretaría de Transporte de ese municipio, en lo corrido de este año solo se han registrado 9 denuncias formales, de las cuales 2 tenían datos falsos, otras 2 están en investigación y las restantes 5 terminaron con sanción, según el secretario de movilidad, Sergio Saldarriaga.

En Medellín la situación no es muy diferente, según cifras de la secretaría de Movilidad este año se han recibido 82 denuncias; no obstante, todas están en proceso y todavía no hay sanciones contra conductores de taxi.

El supervisor de la Secretaría de Movilidad de Medellín, Jhon Jairo Vélez, señaló que en muchos casos las personas que llaman a denunciar no están dispuestas a continuar con la audiencia para ratificar el hecho, razón por la cual no se puede iniciar un proceso sancionatorio.

“Si no hay una denuncia clara con una persona afectada, se pierde el tiempo”, indicó el funcionario quien agregó que la Secretaría sanciona monetariamente, “las medidas disciplinarias le corresponden a las empresas de taxis”.

Vélez le recordó a los conductores que “deben cobrar estrictamente lo que marca el taxímetro y estar dispuestos a trasladarse a cualquier sitio de la ciudad”.

Fuente: El Colombiano

Fotografía: Pixabay

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