Contrato del Ferrocarril del Pacífico podría ser liquidado
El tren del Pacífico parece que se descarrila poco a poco. A pesar de que el concesionario que lo opera anunció que había reiniciado su actividad, las condiciones como esto se ha hecho no son claras para el Gobierno Nacional.
El presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Luis Fernando Andrade, expresó su preocupación por el manejo que se le está dando al corredor desde la concesión.
“No es verdad que se haya reiniciado la operación. Han hecho uno que otro viaje, moviendo cemento de forma piloto y artesanal, pero no hay una movilización regular de carga significativa en el tren”, dijo el funcionario.
Andrade recordó que las dificultades con este contrato de concesión que se firmó desde 1998, empezaron en febrero del año pasado cuando Trafigura suspendió las operaciones basada en tres problemas principales: el paso de las ‘brujitas’ especialmente hacia Buenaventura, la construcción de vivienda en la separación del corredor férreo, y la minería ilegal.
“Nunca negamos la existencia de estos problemas, pero en su momento nos sorprendió la suspensión de la operación por estas causas, porque las cosas estaban mejorando”, comentó Andrade, al tiempo que dijo que “como Trafigura nos manifestó su intención de ceder el contrato a nuevos interesados, entre ellos habían industriales del país y empresas extranjeras, les dimos un nuevo plazo porque el interés del Gobierno Nacional es que el tren funcione”.
Sin embargo, a finales del año pasado las cosas cambiaron y los empresarios que habían manifestado su interés en entrar en la concesión del corredor férreo, que conecta el puerto de Buenaventura con el Eje Cafetero, se dirigieron a la ANI para precisar “que ya no participaban de la operación”.
Este es uno de los aspectos que preocupan al Presidente de la ANI porque “al parecer, la transferencia de las acciones se le hizo a una persona que no tiene la capacidad financiera para sacar adelante este proyecto”, agregó.
En días pasados, el gerente General del concesionario Ferrocarril del Pacífico, Gustavo Giraldo, le dijo a Portafolio que “no nos hicieron la cesión del contrato, hicimos la negociación directamente con Fenwick Group, que es la firma que tiene el control de FDP, por ser accionista mayoritario. La concesión sigue teniendo los mismos socios de años atrás”.
Para Andrade, la transferencia de la propiedad sin ser autorizada por la ANI fue un hecho grave, pues eso lo exige el contrato.
Según el contrato, es una obligación demostrar un patrimonio mínimo de US$ 30 millones por uno de los accionistas para responder por el objeto del mismo.
“En este momento aparece como garante de la capacidad financiera OPP Graneles y esta es una firma que diluyeron y dentro de FDP tiene una participación de 0,13%. No puede ser que un accionista que ya sacaron sea el que aporta la capacidad financiera”, agregó el funcionario.
De igual manera, el contrato exige que el concesionario debe “tener una empresa con amplio conocimiento ferroviario que sea el asistente técnico”.
“En este caso, era la empresa belga Vecturis que lo estaba asesorando, pero en días pasados le escribió a la ANI y le precisó que ya no ejercían esa actividad. En este momento no tienen asistente técnico”, dijo Andrade.
Para el funcionario es de vital importancia conocer las empresas que tienen la concesión son idóneas, es decir, que tienen el capital y el conocimiento necesario.
“Tenemos varios procesos de incumplimiento en curso e iniciaremos otros más. Es inevitable que el contrato se liquide, a menos que cambie algo de manera radical”, argumentó.
Una oportunidad
Frente a esta situación, está la posibilidad de abrir una nueva licitación para que este corredor tenga nuevos operadores y se pacten unas reglas de juego más claras.
Además, se considera que en el nuevo proceso se incluya el proyecto de la variante Cerrito-Yumbo a la actual red férrea para que el tren de carga no pase por Cali, y el corredor de esta ciudad se pueda usar para el transporte de pasajeros.
De acuerdo con el Presidente de la ANI, esta es una iniciativa de la Alcaldía de Cali y la Gobernación del Valle.
“Lo que se busca es poner en funcionamiento el corredor férreo de Cali para el transporte de pasajeros que actualmente se encuentra a cargo del Instituto Nacional de Vías (Invías), pero sin ser operado. Esto se podría incluir en la licitación y estaría a cargo del nuevo contratista la construcción de la variante Cerrito-Yumbo”, puntualizó Andrade.
Fuente: Portafolio
Imagen: Archivo Portafolio